lunes, 31 de diciembre de 2012

Violencia en la etapa del noviazgo



Andrea Pucará de 23 años,  ha sido víctima de violencia y maltratos por parte de su novio durante 3 años, quiere participar en esta entrevista para dar a conocer su historia a mujeres que pueden vivir  lo mismo.
¿De qué tipo de violencia has sido víctima?
En  toda mi relación siempre estuve sometida a los tres tipos de violencia, la física, psicológica y patrimonial.
¿Cómo inició la violencia en tu relación?
Al principio cada vez que peleábamos solo me gritaba o me insultaba porque se llenaba de iras y yo lo entendía porque a mí me pasaba lo mismo. Siempre cogía la primera cosa que tenía cerca y la apretaba como descargándose. Cuando peleábamos en el carro frenaba tan fuerte que yo salía disparada contra el vidrio y me decía, ves para que no te pones cinturón. Con el tiempo ya no solo me gritaba y me insultaba, ahora me empujaba y nos empezábamos a pegar, porque yo no me quería dejar pero era peor.
¿Qué te impedía dejarlo?
El tiempo. Los 4 años de relación me hicieron aferrarme a él, no conocía un mundo sin él, estudiamos en el mismo colegio, estábamos en la misma universidad, compartíamos el mismo círculo de amigos. Para mí era imposible dejarlo porque lo amaba más que a mí propia vida, llevábamos tanto tiempo juntos que yo pensaba que lo que pasaba era mi culpa. Yo le hacía tener iras, y siempre me echaba la culpa hasta llegar el punto de pensar todo lo que le iba a decir antes de hablar para no cometer el error de decirle algo que lo pudiera hacer enojar.
¿Te diste cuenta que estabas siendo víctima de violencia?
Antes yo no quería aceptar que yo estaba siendo violentada, decía somos novios,  esto pasa en todas las relaciones, ya me va a pedir perdón y esto no va a volver a pasar, pero no era así, cada vez era con más frecuencia. Me controlaba la ropa con la que me vestía, si pasaba un chico me reclamaba que lo estaba viendo, si alguien me silbaba me decía que era por vestirme como zorra y todo eso me hacía daño psicológicamente, ya no quería salir a la calle, me sentía fea es decir me quedé sin autoestima.
¿Buscaste ayuda?
Cuando entendí que lo que estaba viviendo era violencia decidí asistir a unas charlas de protección a la mujer y descubrí que todo lo que estaba viviendo era mucho más grave de lo que yo pensaba. Le conté a mis papas todo,  me llevaron a un psicólogo ya que necesitaba ayuda para poder separarme de él. Fuimos a la comisaría a sacar una boleta de auxilio porque él me seguía, si me veía con alguien le pegaba y después de seis meses de tratamiento logre recuperar mi autoestima y alejarme definitivamente de él.

1 comentario:

  1. Bajo ningún concepto se debe permitir el maltrato a una mujer o a un hombre, somos seres humanos que merecemos ser amados y respetados.

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gracias por presentar tus ideas en este blog